sábado, 30 de agosto de 2008

El retiro

Es mi última partida, me retiro para siempre.


¿Cuántas veces hemos escuchado esto? O mejor aún ¿Cuántas veces lo hemos dicho nosotros mismos? Yo llevo en mi corta carrera de empire-striketista tres retiros completamente definitivos y un temporal. El mas largo duró dos partidas. El problema es que no hay una clínica de rehabilitación para ex adictos al ES, tal como existen los alcohólicos anónimos y las clínicas de desintoxicación. A este paso, con las aberrantes clasificaciones psiquiátricas que nos ofrece el DSM-IV, no tardaremos en encontrar el empire-striketismo como enfermedad mental, con su diagnóstico, pronóstico, síntomas y tratamiento.


Y es que el que se engancha no se puede desprender tan fácil. Algunos retirados simplemente cambian su adicción al juego por la adicción al foro. El peor síntoma de adicción del que he sido notificado es de aquel que medía el paso del tiempo en partidas:

- ¿Qué hora es?

- Dos horas y 5 minutos después del paso del día 14 en Kenaron, 46 de Numian.


En mis alejamientos del juego, lo que mas extrañaba, por encima de los amigos y de los foros, era esa extraña dicha que sentía al leer estas sencillas palabras:


INTENTO DE CONQUISTA: Existe un 15.1% de conquistar la ciudad. Finalmente... CONQUISTA!!!!.

Uf… Un placer adictivo (casi) como un orgasmo.

Ser o no ser (top 100)

- Y tu qué top eres?
- Creo que alguna vez quedé en el 127 –Mentí.- Y tú?
- Soy top 100 =) -Me dice con un aire de superioridad, con un orgullo casi irreal.

Empire-strike divide a sus jugadores en dos: los top 100 y el resto. Pareciera ser que se ha institucionalizado esa frontera que es para muchos la mayor aspiración. ¿Cuál es la diferencia entre un top 100 y el miserable que quedó en el rank 101? Toda. Un jugador de élite o un don nadie.

Alguna vez en mis incios, llegué a pensar que no era un gran mérito ser top 100. Que después de tantas partidas, lo extraño sería encontrar jugadores que no hayan logrado la puntuación necesario para terminar dentro de los 100 mejores. Varias rondas después, me sorprendí a mí mismo observando que mi mejor posición era 205. Hay quienes piensan que el top 100 se compra con SMS y los he visto fracasar en sus intentos. Unos más aplazan su retiro indefinidamente hasta lograr la gran meta que se supone los dejaría satisfechos y listos para pasar a otra cosa. Yo, después de varios intentos fallidos, dejé de preocuparme por eso, utilizando argumentos como “no necesito un top 100, no tengo nada que demostrar a nadie” o “¿Quién puso esa regla tan absurda? ¿Qué significado tan especial tiene un 100? Esas aspiraciones comunes y establecidas no van conmigo”.

A pesar de todo, hace unos días desperté con la buena noticia. Casi sin darme cuenta lo había logrado. Sin embargo, después de tocar el cielo con las manos, a la partida siguiente me sentí absolutamente vacío. Ya soy un maldito top 100, sin usar un solo SMS, y ahora qué sigue? Llevar a mi clan al otro maldito top 10 para poder reservar las siglas? (Ahora la antigua meta de llegar al concilio hasta me parece vulgar) Ganar una partida? (Risas) ¿Por qué no cambiar esa cifra, por qué no lo hacemos mas interesante, y el ser o no ser se mida a partir de un número mas atrevido, mas meritorio, qué tal el 78?

jueves, 14 de agosto de 2008

El amor en tiempos de empire-strike

¿Dónde buscar el amor? ¿En las afinidades, los intereses comunes, los gustos compartidos? Si esto es cierto, empire-strike, además del juego, es el lugar donde se puede sembrar el amor.

Este juego es para pocos, solo para los escogidos que pueden ver la belleza y experimentar la diversión en la sencillez. Como pocos juegos en el mundo, polariza las opiniones. Todavía no conozco a alguien que le guste a medias. O lo aborrecen y lo critican, o se apasionan con él.

La inmensa mayoría de los jugadores, sin duda alguna, son hombres. La presencia de una dama, un alma perdida, una despistada, una apasionada, despierta el interés e incluso alborota la libido de más de uno. Es algo que no se ve todos los días; una mujer que le gusta la estrategia militar, los números, las tropas, las guerras ni siquiera se compara a la fantasía de muchos hombres que consiste en que sus mujeres gusten del fútbol, del boxeo, o de los toros. Una empire-striketista es otro nivel. ¿A quién no le gustaría compartir su vida con alguien como ellas? Casiopea (DYT) ¡cásate conmigo! Moon (FWM) ¿quiéres ser mi caballerita Fellow? Consu (LXG) ¡Vamos a formar un hogar extraordinario! Yumi Yue, Elfita, Val, ¿a quién mas apuntamos? (Por cierto, ¿se imaginan un clan formado exclusivamente con mujeres? Hacen Top 5 fácil).

Así las cosas, un día común en este maldito juego consiste en un ataque, una conquista, una adversidad, una guerra, una dimensión, una captura, una propuesta de matrimonio y la tristeza de un desamor.

martes, 12 de agosto de 2008

De Infinit, de que exisitió

En el principio, eran los números. Y los números eran 0 y 1. El espíritu de Infinit revoloteaba sobre los dígitos. Un día, Infinit dijo: hágase empire-strike. Y se hizo empire-strike.

Aunque Infinit no sea el creador del juego, su nombre -lo infinito, lo inmortal, lo eterno- remite a la idea de Dios. Y eso es lo que importa: en el mundo empire-strike, Infinit es Dios. Como en la vida real, tiene el poder de acabar con la vida de los imperios, de disolver naciones, de destruir millones de tropas, de desaparecer ciudades. A veces, los hombres desesperan a Infinit, y éste manda un diluvio para castigar a los pecadores. La gracia de Dios consiste en su contradicción. Es, al mismo tiempo, el más bueno y el mas malo, el amado y el odiado, la justicia y la injusticia. Los hombres se dan cuenta de esto, y no dudan en encararlo, aun conscientes de su inferioridad, y de que la ira y el odio de Infinit es tan grande como su bondad y su amor. Infinit es el todopoderoso, el omnipresente, pero su mundo no escapa de la infelicidad. Es difícil ser Dios. No se puede dar gusto a todos. Infinit, al principio lo intentó, pero fracasó en el intento. Dios mismo puede hacer una piedra que no puede levantar. Dios es, lo decíamos, una contradicción. Infinit da libertad a los hombres de matarse, de destruirse, de traicionarse, de odiarse. Y también de lo contrario.

Algunos hombres le rinden tributos y sacrificios. Otros han edificado una Iglesia, le rezan, y aseguran que las peticiones son cumplidas en forma de milagros. Y las faltas son castigadas con plagas, o con inundaciones y terremotos. Otros, el resto, los menos, no creemos en Infinit, ni en su omnisciencia, ni en su contradicción. Ya lo hemos matado. Nos abandonamos a nuestra suerte, al destino, al azar. Creemos solamente en nuestras virtudes y en nuestras miserias.

Que Infinit bendiga a Infinit.

Empire-strike

-Y qué es eso de empire-strike?
- Es un juego de estrategia militar y civilización que te transporta a un mundo de fantasía donde eres el controlador total de todo un imperio.
- Ah… suena interesante, me gusta la estrategia, lo voy a probar.

- Y los gráficos?
- Gráficos?
- Si, las imágenes, las batallas, donde está la acción?
- Ah, creo que agregaron imágenes a algunas tropas… y hay un mapa de la ciudad que estás construyendo…
- O sea que tu juego es una tabla de Excel? Una orgía de números? Las batallas se reducen a dos clics, a una probabilidad matemática, a una explosión de dígitos?
- Pues… sí.
- Me parece que es el peor juego de la historia.

A veces, cuando tengo conversaciones como esta, me pregunto qué me gusta de este juego. No solo me gusta, me encanta. Es más: soy adicto. A los administradores se les olvidó mencionar ese punto en la descripción, no como mera información, sino como una advertencia: si te enganchas, no te podrás librar de él. Quizá la definición debería ser ésta: “Un juego apasionante, lleno de envidias, rencores, amistades, venganzas, golpes bajos, traiciones, amores. Todas las virtudes y miserias humanas pueden ser encontradas aquí”. Pero, inevitablemente, me quedo corto. Todos los que hemos vivido esta experiencia tenemos nuestra propia definición. Eso es lo que lo hace único. ¿Cuál es la suya?